Después de un hermoso día, es hora de un poco de magia nocturna. Al ponerse el sol, colores surrealistas pintan el jardín de tonos etéreos y los árboles parecen brillar...
En la serena pradera se desarrolla un momento mágico. De repente, el aire estalla de vida: los pájaros alzan el vuelo, las mariposas se arremolinan y las flores se mecen...