Al caminar por una calle abarrotada, nuestra mente se queda grabada con muchas imágenes que se mueven con rapidez: los grafitis desteñidos de las paredes, las diferentes impresiones del interminable...
El mundo en el que vivimos parece sumido en la más pura locura, con gente siempre corriendo por todas partes como si el fin de los tiempos fuera a llegar...